Caballeros de la Quema

¡Al fin sumó de a tres! Atlético paseó a Huracán en su propio rodeo y casi cumple con la regla de las “3G”: Ganar, gustar y golear. Pero el último ítem no se pudo completar por méritos del arquero Gastón Monzón.

Mientras Cappa pedía un Ángel, Héctor Rivoira se encomendaba en "Satanás", que en el fondo sacaba todo, y hasta sacó una asistencia impecable para dejar mano a mano al “Pulga” con el arquero del "Globo" pero el delantero terminó perdiendo por knockout frente al uno local. No fue la tarde del pequeño prodigio de Simoca. En cambio, si fue el partido del gigante Pereyra. Sumó a su acostumbrado sacrificio, el oficio del gol. Clavó un cabezazo en el área chica para levantar los corazones decanos. Allá, bien alto, como el centro de Longo para el lungo, que se encargó de ponerla en la red a la “gordita”.

Y hablando de Sebastián, el carrilero merece un párrafo aparte. El zurdo volante "Decano" hizo lo que quiso. Aprovechó la legalización y voló por sus sector, y hasta tirando caños en el verde césped del Palacio Ducó.

En defensa, “los pelados” Barone y "Villa" afeitaron a cualquiera de Huracán que se animara a pisar el territorio de la visita. Ischuk casi fue de paseo. Intervino poco y mantuvo el cero, lo que es positivo luego de 7 goles en dos fechas.

En el medio, "Capé" entregó una muestra gratis de su talento, fue tan gratis, que quedamos con ganas de más. Erroz va tener que guardar algo de su temperamento para pelearse con Granero cuando el "Vikingo" esté 10 puntos. Diego fue la manija del equipo y una puerta con la que el local se chocó toda la tarde. Damián Musto sigue sin alcanzar lo que supo desplegar en la “B” Nacional, arrancó tomándole la patente a su marca y así se ganó la amarilla a los pocos minutos del inicio del partido, a pesar de ello, fue de menor a mayor y en el segundo tiempo cubrió bien en el fondo y ajusto la marca. Todos saben que puede dar más y por eso se le exige mucho más. Por su parte, Drocco entusiasma. Mostró oficio en ataque, como la vaselina en el pasegol que le taparon a Rodríguez y en defensa no desentona. Antes de que se gane la titularidad habrá que encontrarle otro apodo que no sea “Pulga” al bajito.

Los caballeros pasaron por la quema y dejaron al dueño de casa en llamas, con tres jugados y tres perdido. Esperamos que este triunfo haya quedado grabado a fuego en el 11 decano y sea el partido del despegue.

“Paragua” no te duermas. Pablo Calandria entró y la clavó. Emanuel Gigliotti tuvo una chance y se la taparon. ¡Fabio no te duermas que hay dos con el cuchillo entre los dientes!

Ahora sí no hablamos del árbitro, lo que paradójicamente habla bien de Patricio Lousteau.


Foto: La Gaceta