Parecía que nos volvíamos con tres puntos de oro bajo el brazo después del ansiado reencuentro del Pulguita con la red. Pero otra vez un fallo polémico en contra nos deja con ganas de festejar el triunfo. Fue 1 a 1 con Banfield, uno de los protagonistas del torneo, empate que no vino mal sobre todo por como se jugó y los cambios que se notó en la mano del Chulo, antes y durante el encuentro jugado en el sur bonaherense
Desde un comienzo la formación que presentaba el DK era distinta: hizo su aparición la línea de cuatro, algo que se pedía mucho, sobre todo de visitante, después de lo fácil que se le hizo a Argentinos y a Ñuls crearnos peligro. También se notó la concentración con la que salieron a jugar, metídisimos en un partido que no se podía perder. Y cabe resaltar otro acierto del DT, más bien una corrección a una falla que fue recurrente en este comienzo de torneo: la demora en los cambios. Hoy, cuando se lo notó cansado al Seba Longo tuvo destino de banco, al igual que con César Montiglio. Los carrileros que tanto desgaste hacen en el ida y vuelta no pueden rendir los 90 minutos de la misma forma y hoy el Chulo hizo lo que quizás tendría que haber hecho en varios partidos: darles un descanso y refrescar el medio.
También párrafo aparte para el penal que nos cobraron, otra vez un fallo discutidísimo en contra y van... Pero bueno, por suerte podemos decir que el balance de estos 90 minutos es positivo. Si bien Atlético se puso al frente cuando menos lo merecía gracias a la "Picardía de D10S", que tuvo una y la mando a guardar, luego defendió bien y si no era por la intervención de Faraoni, que le sirvió el empate a un Santiago Silva que estaba hasta ese momento frustrado y desaparecido, la historia pintaba para tener otro final.
Punto importante de todas formas, sobre todo por lo anímico. Se cambió la desconocida imagen que se dejó en Rosario por una mucho más acorde a este equipo aguerrido y ganador que tantas alegrías nos regaló. A esperar al Tomba con pilas para recargar por el receso y con ganas de abrochar los tres puntos venideros en casa, que serán tan grandes como el José Fierro. Y de ahí no se pueden escapar.